Lo cierto es que ya tocaba tejer un jersey para él.
Hace mucho, mucho tiempo que había pedido un jersey.
En una ocasión comencé uno, pero nunca vió su final. Se quedó en un UFO permanente y no hace mucho lo deshice. La lana tampoco es que me gustase demasiado así que ese proyecto quedó totalmente abandonado.
De nuevo este año ha habido petición de jersey. Y no me he podido negar.
La búsqueda del patrón me costó bastante. No encontrábamos algo que nos gustase a los dos. Al final he hecho un mix. Tenía un patrón del que me gustaban los dibujos, pero no me convencía el canesú para él. En cambio de otro me gustaba la forma, pero no los dibujos... Para complicarlo un poco más, la lana que elegí no me encajaba en ninguno de los dos patrones... Para uno de ellos era muy gruesa y para el otro, muy fina.
Así que decidí hacer lo siguiente.
El cuerpo está basado en el patrón Asa by Talitha Kuomi, los dibujos son del patrón Stasis Pullover by Leila Raabe, y las medidas... pues son como se suele decir a "ojímetro" y probando, probando...
La lana utilizada es Merino Classic de Katia.
J. quería un jersey de cuello abierto. Entonces decidimos que llevaría cremallera (otro gran dilema en este jersey). Me he pasado todo el tiempo pensando en cómo quedaría la cremallera. Si sería capaz de tejerla o si se arruinaría todo el jersey una vez tejido.
Comencé el jersey con una elección de color que había visto por Ravelry de uno de los modelos del Stasis Pullover. Verde y gris oscuro, tipo militar.
Pensé que quedaría bien, juntos quedaban bien... Pero al tejer los dibujos, el verde no contrastaba nada.
Para este momento ya tenía tejido todo el cuerpo. Habíamos probado varias veces y pensábamos que iba bien de talla... pero cuando comencé a tejer los dibujos J. me dice que lo ve muy justo, que si puede ser un poco más amplio.
La verdad que sí iba demasiado justo. Queríamos que quedase pegadito para que no fuese un jersey enorme y que colgase por todos lados. En lana, un jersey grande puede ser muy pesado.
Entre lo del color de los dibujos y el tema de la talla... tuve lo que llamé un arrebato. y tiré del hilo completamente.
Volví a comenzar.
Aunque a veces tirar del hilo es una pu****, hacerlo a tiempo te puede evitar más de un disgusto. Puedes perder mucho tiempo intentando arreglar algo que sabes que no lleva arreglo y que el resultado final seguirá sin gustarte nada. Esa prenda está condenada a permanecer en el armario.
Tirar del hilo a tiempo puede suponer más tiempo, pero a la larga puede ser la mejor opción. En este caso aseguro que fue la mejor decisión.
Volví a comenzar, recalculando a "ojímetro" (es lo que tiene tejer así, a ojo) y dando más talla a todo lo que primero quedaba muy justo.
Y elegí otro color para los dibujos.
Todo fue bien. Los dibujos se veían. Probando, probando, talla correcta. Todo bien.
Llegó el momento de la temida cremallera.
No sabía si coser a mano o a máquina. Ni cómo colocarla, ni cómo coserla, ni que hacer con los piquitos que sobraban por arriba...
En fin. Al final me dije: al lío, hasta que no lo cosa, no lo dejo.
Decidí tejerla a mano porque me pareció más seguro. Si me equivocaba, era más fácil de deshacer. Lo presenté, lo puse alfileres, lo hilvané (y mira que yo para todo esto tengo muy poca paciencia), y comencé a coser a mano. Poco a poco, mirando que me coincidiesen los dos lados bien, que no hiciese formas raras, que no se estirase o se encogiese mucho el punto...
Creo que el resultado ha sido bueno. Por lo menos no he desgraciado el jersey ;-)
Te ha quedado de rechupete! La verdad es que tejer para "ellos" suele ser más difícil, por el tamaño de la prenda, por el estilo, y porque nunca estamos seguras de si hemos entendido bien lo que quieren. Pero éste te ha quedado de cine. Deshacer efectivamente es una p**** pero has acertado de pleno!
ResponderEliminarGracias!!!
EliminarLo has explicado muy bien ;-) Tejer para ellos siempre es más difícil!